BANGKOK, 21 dic (IPS) - Cuando no está ocupado diseñando alguna edificación, el arquitecto tailandés Soonthon Prueksapipat se sumerge en sus temores y preocupaciones por sus constantes enfrentamientos con las autoridades de este país.
Este miedo lo ha perseguido en los últimos dos años, admitió a IPS en un café de un barrio histórico de Bangkok.
Pero es el precio que debe pagar por negarse a ser simplemente un testigo silencioso de la agitación política que sufre este reino del sudeste asiático desde el último golpe militar en septiembre de 2006.
El arma de Soonthon para enfrentar a los poderosos militares era un sitio web creado junto a un equipo de profesionales en Bangkok, conformado por médicos, ingenieros y empresarios que conoció en el ciberespacio.
"Nuestro sitio web fue cerrado cinco veces porque la gente en el poder no está contenta con la información que proveemos, pero nos las arreglamos para volver a estar en línea usando un nuevo nombre o cambiando a un servidor extranjero", señaló Soonthon, editor del sitio web que ha sido objetivo de los censores tailandeses desde abril de 2009.
"Los censores del gobierno no están contentos con nuestra misión de proteger la democracia y mantener al ejército fuera de la política", dijo.
La primera vez que fue clausurado "Thaifreenews" –nombre original del sitio web--, las autoridades tailandesas no dieron detalles de su decisión.
"El gobierno no nos informa sobre la razón de cerrarnos. Siempre es una sorpresa cuando descubrimos que hemos sido censurados, al ver que el acceso a nuestro sitio es bloqueado en Tailandia", dijo Soonthon.
Su portal de noticias políticas en tailandés ha recibido 15 millones de visitas desde que fue creado a fines de 2006.
Pero al menos Soonthon se anima a hablar públicamente sobre las batallas que ha librado con la cada vez más dura censura gubernamental, e incluso de sus temores.
Eso no pasó con todos los bloggers y editores de páginas web de Bangkok y ciudades cercanas entrevistados por IPS, que sólo estuvieron dispuestos a dialogar a condición de mantener el anonimato.
"Tengo miedo de que algo me pase por la información que subí a un sitio web que abrí cuatro años atrás", dijo un diseñador web de 32 años, radicado en Bangkok. "No es seguro abrir nuevos sitios web políticos".
Y sus miedos no están infundados, explicaron activistas de medios y de derechos humanos que han seguido de cerca el clima de censura durante estos dos años de gobierno de la coalición derechista Partido Demócrata en Tailandia.
"Muchos cibernautas están recurriendo a la autocensura", reveló Pokpong Lawansiri, activista de derechos humanos.
"Ha habido una serie de arrestos a bloggers, y el gobierno mantiene al país en la oscuridad no mencionando a quién y cuándo ha detenido", añadió.
Activistas acusan al Partido Demócrata y a los militares --que ayudaron a esa fuerza política a llegar al poder gracias a un pacto a puertas cerradas en diciembre 2008-- de haber adoptado como política silenciar a la oposición en Internet.
La campaña de censura fue lanzada tras los abiertos combates este año entre las autoridades y el movimiento popular opositor conocido como "camisas rojas", señalaron.
Más de 90 personas murieron y cerca de 2.000 resultaron heridas durante los sangrientos choques en abril y mayo entre las tropas tailandesas y los manifestantes en las calles de Bangkok.
Un reciente estudio publicado sobre la censura en Internet en Tailandia confirma la tendencia del gobierno a bloquear sitios web arguyendo amenazas a la seguridad nacional.
De enero a noviembre de este año, tribunales ordenaron el cierre de 43.908 URLs (siglas en inglés de "localizador uniforme de recursos", secuencia de caracteres para ubicar material en Internet) y páginas web específicas.
Desde 2007 han sido bloqueados 74.685 URLs, reveló el informe, titulado "Control y censura de los medios en línea a través del uso de leyes y la imposición de la policía estatal tailandesa".
Esos sitios fueron clausurados bajo la Ley de Crímenes Informáticos de 2007, la primera legislación aprobada de urgencia por el parlamento designado por la junta militar tras el golpe de 2006.
Las políticas de censura también se han visto fortalecidas por un decreto de emergencia que le da a los militares poderes especiales para endurecer su represión contra los camisas rojas.
Este decreto fue una herramienta útil en manos del Centro para la Resolución de la Situación de Emergencia, creado este año para reprimir al movimiento opositor y controlado por las Fuerzas Armadas.
"Una fuente confiable de los proveedores de servicios de Internet señaló que los sitios web bloqueados por orden del Centro han llegado a decenas de miles", añadió el informe, co-escrito por Sawatree Suksri, de la Facultad de Leyes de la Universidad de Thammasat, en Bangkok.
Activistas aseguran que han llegado a bloquearse hasta 312.000 sitios.
"El decreto de emergencia suspendió el Estado de derecho y añadió más poder a los censores del Centro", indicó C.J. Hinke, fundador de la organización local de medios Libertad contra la Censura en Tailandia.
"Al menos siete declaraciones en los medios tailandeses citan a funcionarios de gobierno señalando que 312.000 sitios web han sido clausurados por el decreto de emergencia", indicó.
"Los cibernautas en Tailandia tienen razones para preocuparse, porque el gobierno está usando dos leyes para aporrearlos", dijo Hinke. "Los funcionarios tienen licencia para censurar sin ninguna transparencia".
Fuente: IPS Noticias