La policía en el noreste de Tailandia ha sido puesta en estado de alerta, incrementado la vigilancia en las provincias de esa zona para prevenir posibles brotes de violencia.
Esta orden viene de la creencia de que los instigadores de los actos de violencia que se llevaron a cabo en Bangkok en la pasada semana provienen de esa zona o al menos la usan como vía de salida del país.
Para combatir esta situación, se crearán redes de informantes y se aumentarán los controles sobre vehículos que atraviesen la zona y que potencialmente puedan transportar material de contrabando o criminales.
Fuente: Tan Network