Un tribunal de Tailandia liberó hoy bajo fianza a 96 refugiados paquistaníes, incluidos una treintena de niños y un bebé recién nacido, que fueron detenidos el pasado diciembre tras huir de la persecución religiosa en su país.
Los detenidos fueron puestos en libertad tras el pago de una fianza 5 millones de bat (unos 165.000 dólares o 112.000 euros), abonados por la ONG Comité Tailandés para los Refugiados, informaron los medios locales.
El director de la ONG, Veerawit Tianchainan, indicó que los refugiados pertenecen a la secta musulmana ahmadi, reprimidos por las autoridades paquistaníes y blanco habitual de los grupos integristas.
Tianchainan indicó que había 34 niños menores de 12 años entre los refugiados, quienes se hacinaban en celdas con hasta 150 personas, aunque fueron diseñadas para albergar sólo 40, según el diario "Bangkok Post".
"En Pakistán, los ahamdíes son marginados por las instituciones y son víctimas de abusos físicos", afirmó el director del comité de los refugiados, quien agregó que el grupo será alojado en un centro habilitado en Bangkok.Tianchainan explicó que los niños eran separados de sus madres y sus padres e incluso un bebé nació dentro del centro de detención en condiciones "poco higiénicas".
El Comité Tailandés para los Refugiados se encargará de la manutención y el bienestar de los refugiados hasta que las autoridades resuelvan las peticiones de realojamiento de los paquistaníes, probablemente en Estados Unidos.
Los refugiados, quienes han apelado el amparo de la oficina del Alto Comisionado de Naciones Unidas para el Refugiado (ACNUR) en Bangkok, fueron condenados recientemente por un tribunal tailandés de haber entrado ilegalmente en el país.
Tailandia no ha ratificado ningún tratado internacional ni la convención sobre refugiados de la ONU.Los grupos de derechos humanos criticaron la detención de los ahmadíes, después de que el año pasado murieran 99 miembros de esta minoría en Pakistán debido a la violencia religiosa.
La Comisión Nacional de Derechos Humanos de Tailandia afirmó que también trabaja para conseguir la liberación de 44 personas de la minoría birmana rohingya, retenidos en el centro de detención de Bangkok desde hace dos años.
Integrada por unos 3 millones de personas que descienden de los comerciantes árabes que llegaron en el siglo VII a la región birmana de Arakan, la etnia rohingya es habitualmente reprimida por el Gobierno, que no los reconoce como birmanos.
Fuente: Agencia EFE