Los profesionales españoles se encuentran entre los europeos con un nivel más bajo de inglés. Obtienen una calificación de 49 puntos frente a los 69 que alcanza Noruega, los 67 al que llegan los Países Bajos, el 66 de Dinamarca y el 66 de Suecia. Solo Italia se acerca al nivel bajo de los españoles, con una nota similar.
Los datos responden a unos exámenes voluntarios realizados entre 2007 y 2010 a 2,3 millones de ciudadanos del mundo y reflejan que la gran asignatura pendiente de los españoles sigue siendo la barrera idiomática.
Para Eduardo Rubio, director general de la compañía EF Education First, los problemas en España con el inglés parten de dos premisas: "El escaso esfuerzo de la enseñanza de inglés realizado por las Administraciones públicas en las edades más tempranas -en parte subsanado en los últimos 10 años- y, por otro lado, el tener como lengua materna uno de los tres idiomas más hablados en el mundo".
Luis Farrés, director ejecutivo del British School of Barcelona, señala otros culpables. "La manera como se ha enseñado este idioma en España ha sido determinante para nuestro bajo nivel de inglés", asegura Farrés.
Para este experto, el idioma debe aprenderse primero hablando, como ocurre con los bebés, y luego escribiendo.
El método que se aplicó en España hasta los últimos 10 años ha estado basado en el aprendizaje gramatical. "A esto se suma que la generación que ahora lidera las empresas, quienes tienen edades comprendidas entre los 40 y 50 años, solo tuvieron el inglés como materia obligatoria en sexto de la antigua EGB, es decir, con 11 o 12 años, "una edad tardía para empezar un idioma", explica el director de British School of Barcelona, del grupo Cognita, presidido por Chris Woodhead, Her Majesty's Chief Inspector of School in England entre 1994 y 2000.
Lo mismo piensa el profesor Maurer, creador del sistema de 1.000 palabras: "El problema radica en que no se han diseñado buenos métodos. Normalmente se enseña el inglés de forma demasiado convencional, con mucha gramática y normas de memoria", explica. "Nadie puede hablar inglés recordando a cada instante la gramática. Cuando aprendimos a hablar nuestro idioma materno no necesitamos estudiar gramática".
Para aprender inglés ya en la edad adulta, "lo único es dedicar tiempo y esfuerzo", recuerda Eduardo Rubio. También hace falta prestar más atención en la infancia y salir fuera. El informe refleja que los países europeos que mejor hablan inglés llevan 50 años enseñando a los más pequeños y con profesores nativos.
A nivel mundial, sin embargo, España ocupa el número 24 de los 44 países analizados, por detrás de Italia, con el número 23. Pero los hay peores, como Kazajistán, Turquía, Tailandia, Colombia, Panamá y Vietnam.
Fuente: Cindo Días