Yingluck Shinawatra, candidata del partido opositor del depuesto premier Thaksin Shinawatra, logró con una clara mayoría en las elecciones generales de Tailandia, según los primeros sondeos reconocidos también por el derrotado primer ministro.
Yingluck, de 44 años y hermana menor de Thaksin, se convierte así en la primera mujer que asume la jefatura de gobierno en el país. Según el sondeo del canal Thai PBS, el partido Pheu Tahi habría conseguido 313 de los 500 escaños del Parlamento, en tanto la encuesta de la Universidad Assumption le otorga 299 escaños contra 132 al gobernante Partido Demócrata, del actual primer ministro, Abhisit Vejjajiva.
Unos 47,3 millones de tailandeses estaban llamados a las urnas en las cuartas elecciones parlamentarias en seis años. Cerca de 180.000 policías velaron por la seguridad de los 90.800 colegios electorales.
Thaksin, cuyo gobierno fue derrocado en 2006, vive autoexiliado desde 2008 para evitar acabar en la cárcel, pues está condenado a dos años de prisión por abuso de poder, aunque tras los comicios aspira a volver al país. "No quiero causar problemas, sólo contribuir a buscar soluciones", dijo.
Yingluck, sin experiencia política previa, entró hace unos meses en la carrera electoral, en la que hizo de la reconciliación nacional su principal bandera. Tailandia padeció 18 golpes de estado y 17 constituciones distintas, desde su proclamación como democracia en 1932.
Pero vive en medio de una crisis política desde hace seis años cuando los opositores a Thaksin salieron a la calle para protestar contra su supuesta corrupción y finalmente el Ejército dio un golpe de Estado.
Un año más tarde, los tailandeses escogieron de nuevo un gobierno cercano a Thaksin. Los opositores -los llamados "camisas amarillas"- volvieron a tomar las calles hasta que un tribunal disolvió el gobierno con argumentos dudosos.
Fue entonces cuando el actual primer ministro llegó al poder. Su formación, el Partido Demócrata, lleva 20 años sin ganar unas elecciones. En 2010, los entonces opositores "camisas rojas" protagonizaron manifestaciones masivas y durante semanas ocuparon el centro de Bangkok.
Los disturbios se saldaron con la muerte de 92 personas y la intervención del Ejército. "Debemos querernos más", dijo Yingluck durante el acto de cierre de su campaña, marcando una senda que buscará trazar en su gestión: no permitir actos de venganza, al punto que su partido baraja la posibilidad de decretar una amnistía para quienes participaron en las protestas.
Fuente: Ámbito